ANTIOBIÓTICOS/Predicciones muy alarmantes

Suelos contaminados por estiércol con restos de antibióticos

Banco Mundial predice que, para 2050, las bacterias resistentes a los antibióticos —capaces de sobrevivir a medicamentos diseñados para eliminarlas— podrían causar más de 10 millones de muertes humanas al año. Uno de los principales focos donde proliferan estos microorganismos se encuentra en los suelos agrícolas, ya que se utilizan abonos de origen animal de granjas no ecológicas cargados de estos microbios y restos de antibióticos. Pablo Bolaño nos explica más… 

La resistencia antimicrobiana (RAM) es uno de los grandes temas de salud pública de los últimos años y ocupa un lugar cada vez más destacado en las preocupaciones médicas. Un nuevo artículo que ha publicado recientemente la revista “The Lancet” redobla la alarma por la impotencia de la ciencia para responder a bacterias que se vuelven cada vez más peligrosas debido al abuso de antibióticos.

39 MILLONES DE MUERTES EN 25 AÑOS
El trabajo, realizado sobre la base de estimaciones en 204 países, se denomina “Carga mundial de la resistencia bacteriana a los antimicrobianos 1990- 2021: un análisis sistemático con previsiones hasta 2050”. Se trata de una investigación llevada adelante por el Proyecto de investigación global sobre la resistencia a los antimicrobianos (GRAM), y sugiere que la resistencia bacteriana causará 39 millones de muertes entre 2025 y 2050, lo que equivale a tres muertes cada minuto. En los sueños agrícolas prolifera la resistencia a antibióticos porque se utilizan estiércoles procedentes de granjas industriales en las que los animales son expuestos a una gran sobrecarga de antibióticos y las tierras quedan contaminadas…POLICULTIVOSPor otor lado, “Advanced Science” ha revelado en un estudio que la combinación de varias especies vegetales en un mismo cultivo puede frenar la proliferación de estas bacterias dañinas y favorecer otras más beneficiosas en los suelos. Según ha publicado “Ecoticias”, “los resultados apuntan a que, dependiendo del tipo de suelo, una mayor diversidad de plantas reduce entre un 20% y un 50% la abundancia de genes de resistencia a antibióticos y elementos genéticos móviles, que son secuencias de ADN que saltan de un microorganismo a otro y facilitan la transferencia de los genes resistentes”. ¿El motivo? Según el texto de la revista repicado por “Ecoticias”, “los datos señalan que la clave está en los compuestos que las raíces liberan en el suelo, los exudados, como azúcares, hormonas, vitaminas, ácidos orgánicos y aminoácidos, que son fuentes de alimento para estos organismos microscópicos. Cada planta tiene una composición diferente y cada tipo de bacteria tiene preferencia por distintos compuestos. La investigación ha demostrado que, conforme más diversidad de exudados, más se favorecen las poblaciones de bacterias inocuas”.

AGROECOLOGÍA
Si los estiércoles bien compostados utilizados en las tierras agrícolas fueran de procedencia de granjas agroecológicas… no tendríamos este problema. Pero los estiércoles que proceden de granjas industriales están muy contaminados por antibióticos, hormonas, pesticidas… De hecho, también los organismos de las personas tienen una gran sobrecarga antibiótica. Y no siempre porque esas personas consuman directamente antibióticos, sino que los consumen de forma indirecta, a través de la carne, la leche, los huevos, el pescado… que tiene su origen en sistemas de producción convencional en los que se utilizan todo tipo de sustancias para que los animales puedan soportar condiciones de vida que son “infrahumanas”.

POLICULTIVOS
“Combinar varias especies vegetales favorece la disponibilidad de más tipos de compuestos en el suelo. De esta manera, aumenta la variedad de comunidades microbianas, se compite más por los recursos y las bacterias de alto riesgo no pueden proliferar tanto”, resalta Josep Peñuelas, investigador del CSIC en el CREAF y uno de los coautores del estudio citado anteriormente. Otro de los hallazgos, según el texto de “Ecoticias”, es que los suelos que contienen más materia orgánica “son los que se ven más beneficiados por la alta diversidad vegetal. Un motivo podría ser que en estos suelos se usa más estiércol para fertilizarlos y, por lo tanto, hay más carga de bacterias resistentes”. “El ganado de granjas convencionales ingiere antibióticos para tratar enfermedades y, si se administran en exceso, las bacterias pueden desarrollar resistencia. Estos microorganismos acaban en los excrementos que conforman el abono y lo pueden contaminar”, aclara Peñuelas. La ganadería agroecológica extensiva es la solución a muchos problemas actuales, como el de la sobrecarga por antibióticos y otros. Hay que ingerir menos proteína animal, pero que sea de calidad. Y segura…

RESUMIENDO
Resumiendo los resultados del estudio publicado en “Advanced Science”, cabe destacar que los suelos en los que se cultivan diferentes verduras y hortalizas resisten más la ingerencia de la contaminación por antibióticos y se mantienen más sanos y producen alimentos más saludables.  El asunto no es baladí, porque  “las bacterias resistentes a antibióticos presentes en suelos agrícolas pueden transmitirse a los humanos a través de diversas rutas. Por ejemplo, pueden adherirse a la superficie de hojas, frutos y hortalizas. Cuando los alimentos contaminados no se lavan o cocinan adecuadamente, podemos ingerirlos. Una vez en el sistema digestivo, pueden contribuir a transmitir genes de resistencia a antibióticos en la microbiota de las personas”. “Y esto puede hacer que los antibióticos no sean tan efectivos o no funcionen correctamente cuando se usan para tratar infecciones bacterianas», alerta Peñuelas. Los investigadores señalan la importancia de los policultivos y de la rotación de cultivos en los suelos agrícolas para luchar contra la sobrecarga bacteriana producida por la exposición a antibióticos, algo que la agroecología ha solucionado desde hace tiempo. ¿No sería más fácil no contaminar el estiércol no sometiendo a los animales a estrés de antibióticos? En la sociedad moderna, tapamos con parches los problemas, de la misma forma que la medicina alopática alivia los síntomas pero no la enfermedad en sí.

Pablo Bolaño